En el trading, hay dos líneas rojas que definitivamente no debes cruzar:
Primera: nunca dejes que una pequeña pérdida se convierta en una gran pérdida. Una pequeña pérdida es el costo del trading, cometer errores es normal, pero una gran pérdida es fatal. Debes aprender a controlar las pérdidas y evitar que una operación haga que tu cuenta colapse, de lo contrario, no tendrás oportunidad de recuperarte.
Segunda: nunca dejes que una gran ganancia se convierta en una pérdida. En pocas palabras, no dejes que un pato asado se escape. ¿Cuántas oportunidades de ganar mucho hay? Quizás una vez al mes. Si obtienes una gran ganancia pero no la proteges y luego la pierdes, habrás trabajado en vano. Supongamos que tienes una tasa de éxito del 50%, y las otras cuatro veces son pequeñas ganancias o equilibrio, tendrás que compensar las pérdidas con esta gran ganancia. Proteger bien las ganancias es lo que permitirá que la curva de tu cuenta suba en espiral y poco a poco se recupere de las pérdidas. ¿Lo entiendes?