Las transacciones en el mercado secundario son, de hecho, un comportamiento de negociación más abstracto. Debido a que hay una institución de liquidación con normas unificadas, una vez que se acuerdan los términos, no habrá problemas en su ejecución.
Esperar significa negociar solo con un pequeño número de elegidos, y aunque se esté tratando con estos objetos, la mayor parte del tiempo no se aceptan los términos de la otra parte, simplemente se espera y se consume tiempo, viendo quién se cansa primero.
Hay muchos libros en el mercado que enseñan cómo negociar, pero pocos que enseñan a esperar.
Porque comprar y vender acciones parece tener un umbral muy bajo, la gente común puede malinterpretar que hacer negocios con alguien vestido de traje es una actividad muy prestigiosa. Pero, en realidad, en términos de escalabilidad y precisión en la ejecución, esto está mucho más atrasado que las transacciones del mercado secundario.