En agosto de 2020, un amante de la tecnología de Los Ángeles tomó una decisión que le cambió la vida. Mientras investigaba las criptomonedas, descubrió Shiba Inu ($SHIB ), un token meme apodado el "asesino de Dogecoin". Atraída por su bajo precio inicial de 0,00000001 dólares, decidió invertir 1.000 dólares en él, considerándolo un riesgo modesto.
Lo que ocurrió después fue sorprendente. En octubre de 2021, el valor de SHIB se había disparado a 0,00008 dólares, convirtiendo 1.000 dólares en la asombrosa cifra de 8 millones de dólares. Esta condición no sólo cambió su vida, sino que también afectó a quienes la rodeaban.
Hoy en día, se puede comparar el rápido crecimiento de SHIB con el éxito inicial de BlockDAG (BDAG). Esta empresa blockchain ya ha crecido un 2240 % desde su primera preventa, y podrían vislumbrarse ganancias aún mayores en el horizonte.