La campaña para adoptar Bitcoin (BTC) como un activo de reserva estratégica está ganando impulso en los Estados Unidos, con nuevos respaldos de figuras e instituciones influyentes. VanEck, una importante firma de gestión de activos, ha respaldado abiertamente la idea, pidiendo que Bitcoin se integre en las estrategias de reserva estatales y nacionales. El apoyo de VanEck destaca el creciente interés institucional en el potencial de Bitcoin como un activo de reserva moderno.

Michael Saylor y políticos destacados como la senadora Cynthia Lummis también han expresado su apoyo a las reservas de Bitcoin. Lummis propuso recientemente vender partes de las reservas de oro de EE. UU. para comprar Bitcoin, argumentando que diversificar con activos digitales podría mejorar la fortaleza financiera de la nación. Estados como Florida y Pensilvania ya están explorando reservas de Bitcoin a nivel estatal, lo que indica un apoyo descentralizado al movimiento.

A nivel global, la tendencia está ganando impulso. El líder libertario de Polonia, Sławomir Mentzen, se ha comprometido a perseguir una estrategia de reserva de Bitcoin si es elegido, reflejando el atractivo de Bitcoin como herramienta para combatir la inflación y fortalecer la independencia fiscal.

A pesar del creciente entusiasmo, no todos están convencidos. BlackRock, el administrador de activos más grande del mundo, ha adoptado una postura cautelosa, absteniéndose de respaldar una reserva de Bitcoin. En cambio, se enfoca en la tokenización, una aplicación más amplia de la tecnología blockchain. El ETF de Bitcoin de BlackRock ha visto un crecimiento significativo, pero la firma sigue siendo escéptica sobre el papel de Bitcoin como activo de reserva gubernamental.

Los críticos también argumentan que la volatilidad y la naturaleza divisiva de Bitcoin lo hacen inapropiado para reservas nacionales. El inversor multimillonario Mike Novogratz expresó dudas, afirmando que los obstáculos políticos y el valor fluctuante de Bitcoin podrían impedir su adopción como activo de reserva.

Los resultados electorales de EE. UU. han agregado optimismo sobre el futuro de Bitcoin. El presidente electo Donald Trump hizo campaña para crear una reserva estratégica de Bitcoin, y políticos pro-cripto ganaron escaños en el Congreso. Este apoyo político, combinado con un entorno regulatorio favorable, podría acelerar la adopción de Bitcoin en estrategias financieras.

A medida que los debates continúan, la campaña por las reservas de Bitcoin ha despertado interés global. La pregunta sigue siendo si Bitcoin emergerá como el estándar de oro de la era digital o enfrentará resistencia de los sistemas financieros tradicionales y de los responsables políticos cautelosos.