El valor de mercado de la deuda pública de Brasil actualmente supera los 7 billones de reales (aproximadamente 1,4 billones de dólares), lo que representa alrededor del 90% del PIB del país. Esto refleja una elevada deuda, principalmente interna (alrededor del 85%) y una porción menor de deuda externa. La elevada carga tributaria y el gasto social son factores importantes que contribuyen al crecimiento de la deuda, y el gobierno enfrenta desafíos para equilibrar sus finanzas públicas, controlar el déficit fiscal y garantizar la sostenibilidad económica.
Sin embargo, si no se adoptan reformas fiscales para reducir el déficit, aumentar los ingresos y controlar el gasto público, el riesgo de una crisis fiscal y, en consecuencia, una crisis económica profunda aumentará significativamente en un horizonte de cinco a diez años.