Investigadores de Exponential Science y University College London han analizado el impacto ambiental de prohibir la minería de Bitcoin. Encontraron que tales prohibiciones podrían llevar a un aumento en las emisiones de dióxido de carbono de hasta 2.5 millones de toneladas por año. Mover las actividades mineras a regiones con mayores emisiones de carbono podría socavar los objetivos ambientales en países como Canadá, Paraguay, El Salvador y Noruega.
Sin embargo, en países con fuentes de energía intensivas en carbono como Kazajistán, China y Malasia, una prohibición podría reducir las emisiones. Los investigadores sugieren un marco regulatorio más matizado para la minería de Bitcoin, con autoridades que fomenten el uso de fuentes de energía renovable en áreas de alto carbono y proporcionen subsidios para reubicar las actividades mineras en regiones de bajo carbono.
Fuente
<p>La publicación El Impacto Ambiental No Intencionado de las Prohibiciones de Minería de Bitcoin apareció por primera vez en CoinBuzzFeed.</p>