La tasa de adopción de productos de cifrado está superando rápidamente la trayectoria de desarrollo de Internet y los teléfonos móviles y muestra las siguientes cuatro características:
Digitalización económica: La digitalización está penetrando de manera integral en todos los ámbitos de la vida, especialmente teniendo un profundo impacto en el campo financiero. Los criptoactivos se convierten en una parte importante de esta transformación.
Crisis de confianza: la confianza de la gente en los gobiernos, las instituciones financieras y el sistema monetario tradicional se está debilitando gradualmente, especialmente bajo presión inflacionaria; esta tendencia es más significativa.
Dividendo demográfico: los inversores de la Generación Millennial y Z poseen más activos criptográficos que los baby boomers y se han convertido en una fuerza importante que impulsa el crecimiento del mercado.
Infraestructura madura: la infraestructura en el campo de los activos digitales continúa desarrollándose, reduciendo el umbral para que nuevos usuarios ingresen al mercado y sentando las bases para la popularidad generalizada de los criptoactivos.