Esta semana, todas las miradas están puestas en el informe del Índice de Precios al Consumidor (IPC) de septiembre de la Oficina de Estadísticas Laborales de EE. UU., cuya publicación está prevista para el jueves 10 de octubre. Los economistas pronostican que la inflación general aumentará un 0,1%, mientras que se prevé que el IPC subyacente, que excluye los costos de los alimentos y la energía, aumente un 0,2%.

Sobre una base anualizada, se espera que el índice subyacente de precios al consumidor disminuya al 2,3%, mientras que se prevé que la inflación subyacente se mantenga en el 3,2%. Si los resultados superan las expectativas, Bitcoin podría enfrentar una presión a la baja, ya que el aumento de la inflación podría limitar la capacidad de la Reserva Federal para recortar las tasas de interés.

Además, la Oficina publicará el Índice de Precios al Productor (IPC) básico, que sigue la inflación mayorista. Un aumento en el PPI puede indicar un aumento en los costos de los insumos, lo que podría afectar las operaciones de extracción y procesamiento de criptomonedas.

Otro factor crítico es el informe inicial de solicitudes de desempleo, que sigue a datos de empleo más sólidos de lo esperado en septiembre. Los datos sólidos sobre el empleo podrían reducir aún más la probabilidad de que los recortes de las tasas de interés afecten a los mercados de criptomonedas. Por último, esta semana también se esperan informes de ganancias del tercer trimestre de las principales instituciones financieras, lo que podría afectar el sentimiento general del mercado.