La agencia de noticias financieras FX168 (Norteamérica) informó el sábado (28 de septiembre) que mientras la industria de las criptomonedas se prepara para las elecciones de 2024, existe una opinión creciente de que la victoria del expresidente Donald Trump podría ser buena para Bitcoin y el sector de activos digitales en general.

Gary Gensler, presidente de la SEC en la administración Biden, suele ser visto como un obstáculo para la innovación en criptomonedas, por lo que muchos en el sector esperan un cambio de política. Pero Caitlin Long, directora ejecutiva de Custodia Bank, no cree necesariamente que cambiar al presidente por sí solo resolverá los problemas que mucha gente espera.

"En su primer mandato, el secretario del Tesoro [Steve] Mnuchin se opuso firmemente a las criptomonedas", explicó Long en una reciente entrevista con Coinage. Enfatizó la importancia de nombramientos como el del secretario del Tesoro para dar forma al panorama regulatorio de las criptomonedas. "Es importante a quién designe Trump como secretario del Tesoro porque eso dominará la toma de decisiones. Muchas políticas las elabora el Departamento del Tesoro porque el Tesoro tiene el IRS, la OCC y la FinCEN".

Según Long, el rumoreado nombramiento de Trump como CEO de JPMorgan Chase, Jamie Dimon, ha suscitado cierto escepticismo. “¿Qué crees que hará Jamie Dimon? ¿Ayudará a alguna pequeña empresa emergente? No. Le gustan los grandes bancos”, señaló Long, destacando una posible desconexión entre las esperanzas de los entusiastas de las criptomonedas y las realidades de las finanzas tradicionales.

Las posibles elecciones de Trump para el gabinete arrojan luz sobre un debate más amplio dentro de la comunidad de criptomonedas: la división entre la adopción de criptomonedas impulsada por Wall Street y los fundamentos filosóficos de la descentralización. Como dijo Long, “Hay una división real en la multitud de Bitcoin entre los pro-Wall Street, ‘Vaya, los números han subido, solo estamos aquí para comerciar’, y las personas que están comprometidas filosóficamente con la descentralización”.

Curiosamente, el equipo de transición de Trump ha reflejado esta división. Por un lado, está el director ejecutivo de Cantor Fitzgerald, Howard Lutnick, que se convirtió en un actor importante en el espacio de las criptomonedas debido a la participación de su empresa en la custodia de los miles de millones de dólares en activos del tesoro de Tether. Por otro lado, está la ex congresista Tulsi Gabbard. Long señaló que es alentador ver a ambas figuras en el cargo, pero sus enfoques son muy diferentes.

“Ambos son pro-criptomonedas, lo cual es genial. Uno está realmente comprometido con la descentralización. El otro es el CEO de una importante firma [de corretaje y agente de bolsa] de Wall Street”.

La preocupación más amplia, cree Long, es que si bien la retórica de Trump suena a favor de las criptomonedas, los detalles de a quién designa y cómo elaboran la regulación pesarán más que cualquier voz a favor de las criptomonedas. Sin duda, el presidente Trump levantó muchas cejas cuando prometió en Bitcoin Nashville convertir a Estados Unidos en “la capital de las criptomonedas del planeta”.

Mientras la industria de las criptomonedas mira hacia las elecciones de 2024, la pregunta sigue siendo: ¿será el regreso de Trump la panacea criptográfica que muchos esperan, o simplemente fortalecerá la posición de los actores financieros tradicionales a expensas de proyectos más pequeños e innovadores?

Para Long, la respuesta depende de una cosa: quién toma las decisiones.