Chicos, tanto la inflación como el crecimiento del gasto de los consumidores en los Estados Unidos en agosto no cumplieron con las expectativas. En cuanto a la inflación, tanto el PCE como el PCE subyacente fueron ligeramente inferiores a lo esperado. Para desglosarlo, la inflación de bienes está cayendo, mientras que la inflación de servicios ha aumentado y disminuido. El indicador PCE, al que la Reserva Federal concede gran importancia, muestra que la inflación se acerca cada vez más al objetivo del 2%. Ha disminuido significativamente en comparación con el año anterior y los dos años.

El PCE del gasto de los consumidores en agosto fue menor de lo esperado mes a mes, pero aún así aumentó año tras año, y el gasto real de los consumidores fue ligeramente mayor que antes. Sin embargo, los ingresos personales son un poco más bajos mes a mes y año tras año, y la tasa de ahorro también ha disminuido.

En general, los datos de esta noche son bastante buenos: la inflación estadounidense sigue enfriándose, los consumidores siguen gastando dinero para apoyar la economía y el crecimiento se está desacelerando, lo que puede considerarse un aterrizaje suave. La desventaja es que el gasto de los consumidores es ligeramente menor de lo esperado. Y los ingresos se han desacelerado y las tasas de ahorro han caído, lo que puede ejercer presión sobre el consumo durante el resto del año.​

Actualmente, los futuros de tipos de interés implican que la Reserva Federal seguirá recortando los tipos de interés en 50 puntos básicos en noviembre.