La región de Medio Oriente y el Norte de África (MENA) ha sido testigo de un aumento significativo en la actividad de criptomonedas, que representa el 7,5 % del volumen de transacciones globales entre julio de 2023 y junio de 2024. Este crecimiento está impulsado principalmente por inversores institucionales y profesionales, que representan una parte sustancial de las transacciones de criptomonedas de la región.

El informe de Chainalysis revela que el 93% de las transacciones en la región MENA fueron de 10.000 dólares o más, lo que indica una marcada preferencia por las inversiones a gran escala. Los inversores minoristas, por otro lado, representaron solo el 1,8% del volumen total de transacciones.

Si bien los exchanges centralizados siguen siendo el canal principal para las transacciones de criptomonedas en la región MENA, existe un creciente interés en las plataformas descentralizadas. Los Emiratos Árabes Unidos (EAU) y Arabia Saudita han mostrado un entusiasmo particular por adoptar tecnologías descentralizadas.

Los Emiratos Árabes Unidos se han convertido en un centro mundial de criptomonedas, en gran medida debido a su claro marco regulatorio y su postura de apoyo a los activos digitales. La sentencia del Tribunal de Primera Instancia de Dubái que reconoce las criptomonedas como pagos válidos para contratos de trabajo es un hito importante en el proceso de adopción de criptomonedas en la región.

La Autoridad Reguladora de Activos Virtuales (VARA) de los Emiratos Árabes Unidos ha estado trabajando activamente para crear un entorno propicio para las empresas de criptomonedas. La reciente asociación con la Autoridad de Valores y Materias Primas (SCA) agiliza el proceso regulatorio y brinda mayor protección a los inversores.

El Banco Central de los Emiratos Árabes Unidos ha reforzado aún más el ecosistema criptográfico del país al aprobar un producto de seguro de custodia. Este producto protegerá a las instituciones financieras y a sus clientes de pérdidas debidas a ataques informáticos, fraudes internos o daños a la infraestructura de almacenamiento.

La región de Oriente Medio y el Norte de África se está convirtiendo rápidamente en un actor importante en el mercado mundial de criptomonedas. El entorno regulatorio favorable de la región, junto con el creciente interés institucional, está impulsando la adopción y el crecimiento de los activos digitales. A medida que la industria de las criptomonedas continúa evolucionando, la región MENA está bien posicionada para desempeñar un papel de liderazgo.