Mientras la Reserva Federal se prepara para su decisión sobre las tasas, los analistas de Wells Fargo instan a los inversores a mirar más allá del debate sobre un recorte de 50 puntos básicos (pb) versus 25 pb, describiéndolo como "ruido".
En cambio, el banco dice que los inversores deberían centrarse en la orientación futura proporcionada por la Fed, que ayudará a dar forma a las expectativas del mercado y guiar las decisiones de inversión.
"La Fed debe brindar una comunicación más certera sobre sus orientaciones futuras", escriben los analistas, y agregan que una comunicación más clara permitirá a los individuos y a las empresas planificar mejor y evitar la necesidad de una excesiva expansión monetaria más adelante.
Dado que los futuros del mercado implican una probabilidad del 66% de un recorte de 50 puntos básicos y una probabilidad del 34% de un recorte de 25 puntos básicos, Wells Fargo señala que ninguno de los resultados sería una sorpresa.
"Es poco probable que haya fuegos artificiales por la tarde", afirman, haciendo referencia a la mínima reacción del mercado ante escenarios similares de recortes de tasas en 2001 y 2007.
Una métrica clave a tener en cuenta, según Wells Fargo, es el rendimiento de los bonos del Tesoro estadounidense a 2 años.
"Para este ciclo de flexibilización, nuestro consejo es el mismo", afirman, recomendando a los inversores que sigan el rendimiento de los bonos a dos años para evaluar el camino que seguirá la Fed. Dependiendo del enfoque de la Fed, la tasa de los fondos federales podría alcanzar el 3,875% en enero o mayo de 2025.
Una menor volatilidad de las tasas, impulsada por una trayectoria más clara de la Reserva Federal, podría beneficiar los diferenciales hipotecarios y a los consumidores, y Wells Fargo señaló que esto "debería reducir la incertidumbre y, en última instancia, los diferenciales".
Destacan acciones de mejoras para el hogar como Home Depot (HD) y Lowe's (LOW), que han comenzado a recuperarse, lo que sugiere el comienzo de un "movimiento más grande" para el sector.
El banco también disipa los temores de que se repita lo ocurrido en 2001 o 2007, señalando que los diferenciales de crédito siguen siendo estrechos y la liquidez es abundante, lo que indica un comercio con aversión al riesgo limitado.