En la serie de confesiones anónimas de criptomonedas de hoy, un comerciante compartió una historia personal de buena voluntad que pasó desapercibida. La historia comenzó con un entusiasta de las criptomonedas anónimo que se topó con una billetera que contenía $105k en tokens JUP no reclamados. A solo horas de que se cerrara la ventana de reclamo, este comerciante hizo lo que muchos nunca considerarían: rastreó al propietario de la billetera en Twitter (ahora X), asegurándose de que los tokens fueran recuperados. Pero en lugar de gratitud, se encontró con el silencio. Ni agradecimiento ni reconocimiento, solo el sonido de los grillos.
Busqué la billetera de un tipo que tenía $105k JUP sin reclamar unas horas antes de que terminara el reclamo. Los encontré en Twitter y reclamaron los $105k y no me dieron nada a modo de agradecimiento.
— Coinfessions (@coinfessions) 17 de septiembre de 2024
Es un golpe en el estómago, sin duda. Imagínese hacer todo lo posible, tomarse un tiempo de su día para ayudar a alguien a conseguir tokens por un valor de seis cifras, solo para no recibir nada a cambio. Eso es lo que vivió este comerciante, y la sensación es muy familiar en el siempre ajetreado mundo de las criptomonedas, donde todos tienen la vista puesta en el premio. "Los encontré en Twitter, y reclamaron los $105k y no me dieron nada a modo de agradecimiento", se lamentó el comerciante. Es una píldora difícil de tragar, darse cuenta de que incluso cuando uno se esfuerza por hacer lo correcto, no todos lo apreciarán.
La confianza y la gratitud son dos caras de la criptomoneda
Ahora bien, si bien es fácil centrarse en la decepción, aquí hay una gran lección tanto para el comerciante como para cualquier persona en el espacio de las criptomonedas: no esperes nada a cambio. Es duro, pero en un mercado impulsado por el anonimato, las interacciones fugaces y, muchas veces, el interés propio, esperar gratitud puede ser simplemente prepararte para una decepción. El valor de la buena voluntad en las criptomonedas a menudo se pasa por alto y, en este caso, las acciones del comerciante dicen mucho sobre su integridad, incluso si no fueron recompensados en especie.
Se podría argumentar que, en retrospectiva, este comerciante podría haber abordado las cosas de manera diferente. Tal vez acercarse con un mensaje claro: "Oye, encontré tus tokens JUP de $105k; si los reclamas, ¡agradecería una pequeña propina!", podría haber cambiado el resultado. Podría haberlo hecho... Pero en realidad, muchas personas, especialmente en el mundo descentralizado de las criptomonedas, operan en un nivel más transaccional. Hay un dicho famoso: "No hagas el bien esperando agradecimientos; haz el bien porque es lo correcto", y esta historia reafirma ese sentimiento. El comerciante hizo lo que creía que era correcto, y eso vale su peso en tokens JUP, incluso si la apreciación no siguió.
¿Cuál es el problema, de todos modos? El dinero no lo es todo, ¿verdad?
Si bien este comerciante demostró tener mucho coraje, siempre hay margen de mejora. Podría haber establecido expectativas más bajas o incluso haber abordado la situación con un poco más de realismo. Es importante recordar que, especialmente en el ámbito de las criptomonedas, el anonimato que ofrece seguridad también elimina las conexiones personales que podríamos esperar en las finanzas tradicionales. ¡Y eso es muy cierto! A veces, es mejor no esperar nada y, si se obtiene algo, es solo una ventaja.
En el futuro, tal vez este trader (y cualquier otra persona en el sector) podría aprender a poner su salud emocional en primer lugar. Ayudar a alguien es loable, pero cuando el costo emocional supera el acto, puede que sea el momento de repensar cuánto de uno mismo invierte en estas situaciones. Un simple mensaje directo antes de lanzarse de cabeza a un acto de bondad podría ser de gran ayuda para establecer expectativas en ambas partes. Al final, la lección es simple: el mundo de las criptomonedas, a pesar de toda su innovación y potencial, sigue siendo en gran medida un reflejo del mundo real, lleno de personas que, a veces, simplemente no dan las gracias. Pero para aquellos que ayudan, la recompensa no siempre está en la respuesta, sino en el acto en sí. Si bien el trader puede no haber recibido el agradecimiento que merecía, hizo algo que pocos harían: buscar a un extraño para que lo ayude a reclamar una fortuna. Y eso, en sí mismo, es una victoria.
La publicación Cuando las buenas acciones no son apreciadas en el mundo de las criptomonedas: la búsqueda de un buen samaritano de $105 000 en tokens JUP apareció primero en Coinfomania.