Después de unos días, el precio bajó de 64.000 a 58.000. Sin duda, la codicia de la naturaleza humana está a la vista.

En este mercado de juegos, no hay ganador, siempre y cuando permanezcas en este grupo.

Al igual que un jugador, mientras no abandone la mesa de juego, no importa cuánto gane, al final perderá.

Pero es aún más difícil irse. Una es que ciertas fuerzas no te dejarán ir fácilmente y la otra es que es difícil vencer tus propios deseos.

Así que pasé la mitad de mi vida con altibajos y terminé sin nada.