Según un nuevo informe de The Economist, el optimismo de los inversores institucionales sobre los activos digitales sigue aumentando y se espera que su asignación de activos digitales aumente al 7% para 2027. Aunque el espacio enfrenta desafíos como la falta de coherencia regulatoria y la liquidez fragmentada, se espera que el mercado de activos tokenizados supere los 10 billones de dólares para 2030. Al mismo tiempo, cada vez más inversores institucionales están empezando a explorar otras herramientas de inversión además de las criptomonedas, como las apuestas y los derivados.

Conclusiones clave

- Los inversores institucionales son optimistas sobre los activos digitales y han comenzado a invertir activamente en diferentes instrumentos financieros como prendas y derivados.

- Según el informe, se espera que la asignación de inversores institucionales a activos digitales alcance el 7% para 2027.

- Actualmente, las asignaciones de activos digitales de los administradores de activos institucionales solo oscilan entre el 1% y el 5%.

- El 51% de los inversores institucionales están considerando inversiones al contado en criptomonedas.

- La falta de uniformidad en el marco regulatorio crea desafíos de cumplimiento y gestión de riesgos para los inversores institucionales.

- Los problemas de liquidez fragmentada pueden provocar inestabilidad en el mercado y hacer que las instituciones enfrenten dificultades para ejecutar operaciones.

- A través de tecnologías como las transferencias de tokens nativos, los inversores institucionales están encontrando nuevas formas de resolver el problema de la dispersión de la liquidez.