Todas las familias del este de Asia tienen el mismo problema: les gusta enfatizar la piedad filial, entre la cual la obediencia es la clave.

Significa que los niños deben obedecer a sus padres y escucharlos, por eso hay un dicho que dice que los padres no están lejos.

Este tipo de proyección excesiva hará que el proceso de tener hijos sea especialmente complicado.

Por lo tanto, las familias altamente desarrolladas del este de Asia tenderán a tener menos hijos.