Según ChainCatcher News, el exsecretario del Tesoro de Estados Unidos, Summers, dijo recientemente en el programa "Wall Street Week" de Bloomberg TV que "es un juego estúpido involucrar a los políticos" y "el resultado final es una mayor inflación y una economía más débil".

Summers advirtió que cualquier influencia presidencial en la formulación de políticas monetarias de Estados Unidos acabaría dañando la economía. Los funcionarios del gobierno “siempre quieren imprimir más dinero, bajar las tasas de interés, pisar el acelerador para impulsar la economía”. Esta presión aumenta las expectativas de inflación, lo que eleva las tasas de interés a largo plazo. Tales acciones por parte de funcionarios gubernamentales sólo "aumentan la inflación sin un crecimiento material de la producción".

En cuanto a la actual decisión política de la Reserva Federal, Summers dijo que cualquier recorte de emergencia en las tasas es innecesario "basado en los hechos actuales", dado que la volatilidad del mercado y las ventas masivas del mercado de valores han disminuido desde la agitación del lunes pasado.

Summers, sin embargo, cree que "un recorte de 50 puntos básicos puede ser apropiado" en la reunión de política monetaria de septiembre. (Diez de oro)