Título original: "Grupos terroristas buscan donaciones de criptomonedas utilizando Monero: alarmante informe de la ONU"
Autor: Jahnu Jagtap, Cryptotimes
Compilado por: Félix, PANews
La lucha global contra el terrorismo enfrenta nuevos desafíos a medida que los grupos terroristas se adaptan a un mundo cada vez más digital y encuentran nuevas formas de recaudar y mover fondos. Según las recientes conclusiones del Grupo de Vigilancia del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, la notoria organización terrorista ISIL se basa en su "hawala" de confianza desde hace mucho tiempo (Nota: se refiere a un método informal de movimiento financiero, generalmente a través de distribuidores no autorizados. Este tipo de transacciones Las transacciones son externas el alcance regulatorio del Banco Central de la India, por lo que no se puede rastrear la fuente de los fondos) "migró" a las criptomonedas.
El informe señala que grupos terroristas como ISIL y Al Qaeda están abandonando los métodos tradicionales de recaudación de fondos como la hawala, el secuestro y la extorsión, y ahora prefieren utilizar criptomonedas "más anónimas" (Monero como representante) e incrustar códigos QR para recaudar fondos en sus revistas electrónicas promocionales.
Estas organizaciones incluso establecieron "normas halal" (halal se traduce como legal en las sociedades islámicas) para promover su ideología y operaciones. El informe dice que los grupos establecieron dos canales cifrados dedicados en la aplicación de mensajería Telegram, llamados CryptoHalal y Umma Crypto, para instruir a sus seguidores a adquirir y utilizar monedas digitales específicas y aceptar la aprobación basada en una "evaluación preliminar de las donaciones de Crypto".
Por ejemplo, ISIL-K aprovechó el anonimato de las monedas de privacidad lanzando una campaña de recaudación de fondos utilizando un código QR vinculado a una billetera Monero. Aunque algunos intercambios de cifrado han eliminado a Monero de la lista, su uso por parte de grupos terroristas ha seguido aumentando, lo que dificulta a las autoridades rastrear el flujo de fondos.
En agosto de 2020, el gobierno de Estados Unidos confiscó más de 300 cuentas cifradas, múltiples sitios web y páginas de Facebook que supuestamente pertenecían a miembros de al-Qaeda, ISIS y el grupo militar Hamás.
En particular, el uso cada vez mayor de plataformas digitales por parte del EIIL ha causado una creciente preocupación entre los estados miembros. Se utilizan varios intercambios de criptomonedas, plataformas de juegos, billeteras electrónicas y monedas estables para recaudar y mover fondos. Un Estado miembro señaló que, si bien los correos en efectivo y las remesas hawala son el método preferido para transferir fondos a zonas de conflicto, ISIL ha avanzado intencionalmente hacia las criptomonedas y los sistemas de pago en línea. Se espera que este fenómeno se vuelva más común e importante a medida que los métodos digitales como las billeteras electrónicas, las ventas de tarjetas telefónicas móviles prepagas y las criptomonedas se vuelvan más populares.
Debido a su capacidad para ocultar los detalles de las transacciones, las monedas de privacidad como Monero se han convertido en el medio preferido para la financiación del terrorismo. El informe de la ONU destaca la dificultad de monitorear estas transacciones porque proporcionan un nivel de anonimato incomparable con los sistemas financieros tradicionales. ISIL y sus afiliados explotan estas características para actividades de recaudación de fondos, asegurando que sus actividades financieras no sean detectadas por las autoridades.
El informe también destaca la complejidad de las redes de financiación del terrorismo. Los afiliados del EIIL, particularmente en África, contribuyen significativamente a la financiación de la organización. Estos afiliados suelen recurrir a canales informales, lo que los hace menos susceptibles a la interferencia. Por ejemplo, ISIL-K recaudó 2,5 millones de dólares en 2023, algunos de los cuales pueden estar vinculados a ataques específicos, lo que pone de relieve la amenaza actual que representan estos grupos.
Este duro informe del Grupo de Supervisión del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas seguramente atraerá la atención de varios países, incluidos Estados Unidos, Gran Bretaña, Europa e India. Recientemente, la Red de Ejecución de Delitos Financieros (FinCEN) del Departamento del Tesoro de Estados Unidos emitió una advertencia instando a las instituciones financieras a monitorear las transacciones de criptomonedas que puedan estar relacionadas con la organización terrorista Hamás.
Además, el impacto de este informe también afectará a la industria de la criptografía. Porque es probable que las agencias de seguridad de línea dura intensifiquen la vigilancia de los flujos de activos vinculados a actividades sospechosas.