China y Rusia están utilizando pagos digitales, como criptomonedas, para el comercio y evitar sistemas bancarios lentos y complicados debido a las sanciones.
Están tratando de reducir la dependencia del dólar estadounidense, y más de la mitad de los pagos comerciales chinos ahora se realizan en RMB en lugar de dólares.
Los países BRICS están planeando vincular sus sistemas financieros utilizando monedas digitales, queriendo una independencia total del dólar.
China y Rusia están abandonando la banca tradicional por pagos digitales en sus acuerdos comerciales. Las sanciones a Rusia han convertido la banca en una pesadilla, y algunas transacciones tardan meses en liquidarse.
Esta molestia ha empujado a ambos países a explorar alternativas digitales más rápidas y eficientes. Qifa, una plataforma digital que opera en Beijing y Moscú, se ha convertido en un actor clave en esto.
Según se informa, reconocieron que el uso de pagos digitales, incluidas las criptomonedas, puede acelerar las transacciones, completándolas a veces en solo un día.
Con menos bancos chinos dispuestos a arriesgarse a sanciones, estos métodos digitales se están volviendo cada vez más críticos.
El alejamiento del dólar estadounidense
Esta adopción de los pagos digitales no se trata solo de velocidad. No, es parte de una agenda más amplia para alejarse del dólar estadounidense. Los países BRICS han tenido dificultades con el dominio del dólar.
Brasil ha luchado con altibajos económicos debido a los cambios en el valor del dólar. El mercado de valores de la India se ha visto afectado porque los inversores estadounidenses retiraron su dinero. Rusia y China también se han enfrentado a sanciones estadounidenses, lo que dificulta hacer negocios a nivel internacional.
Rusia, en particular, empezó a buscar desesperadamente alternativas hace unos años. Hasta ahora, el país ha permitido el uso de monedas estables como el USDT para pagos internacionales, e incluso se habla en el parlamento ruso de legalizar todas las criptomonedas para el comercio exterior.
Esto podría ayudar a Rusia y sus socios a evitar permanentemente el uso del dólar. El año pasado, más de la mitad de los pagos chinos en el comercio con Rusia se liquidaron en RMB, su moneda local.
Sólo el 42,8% se realizó en dólares estadounidenses, lo que muestra un claro alejamiento del dólar. Los países BRICS también están trabajando en un nuevo sistema llamado BRICS Bridge, diseñado para vincular sus sistemas financieros utilizando monedas digitales de sus bancos centrales.
Hace unas semanas, el presidente ruso Vladimir Putin dijo que en este momento, el 90% del comercio entre Rusia y China utiliza sus monedas locales, rublos y yuanes.
Se celebrará una gran cumbre de los BRICS en Rusia en octubre de 2024, donde se espera que este tema ocupe un lugar central. Los líderes tanto de los países antiguos como de los nuevos elaborarán estrategias sobre la desdolarización.