Robert Kiyosaki predice que los precios del oro, la plata y Bitcoin (BTC) se fortalecerán. Esta predicción se basa en el optimismo de que si Donald Trump gana la presidencia de los Estados Unidos (EE.UU.), esto será el motor del aumento de estos tres activos.
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Dijo que se necesitaba un dólar más débil para que Estados Unidos pudiera empezar a exportar más que a importar. Con un dólar más débil, los empleos regresarán y los precios de los activos subirán, dijo Kiyosaki.
Según Kiyosaki, este ajuste económico no sólo aumentará el crecimiento de las exportaciones sino que también hará subir los precios del oro, la plata, el Bitcoin, las acciones y los bienes raíces. Estima que el precio del oro aumentará de 2.400 a 3.300 dólares por onza, el de la plata de 29 a 79 dólares por onza y el del Bitcoin de 67.400 a 105.000 dólares por moneda para agosto de 2025.
Kiyosaki cree que si Trump se convierte en presidente de Estados Unidos, debilitará el dólar estadounidense.
La política de Trump y la industria criptográfica
Cuando Trump tomó la delantera, Bitcoin subió alrededor de un 3,796%, seguido de una estrategia de no intervención que resultó ser un catalizador importante para Bitcoin y para el mercado en general.
La falta de regulaciones estrictas bajo la administración Trump ha permitido una mayor expansión en el espacio criptográfico, fomentando un entorno donde los proyectos de Bitcoin y blockchain pueden prosperar relativamente sin obstáculos.
Las políticas económicas de Trump, incluidos los recortes de impuestos y la desregulación, también contribuyeron a un clima de inversión favorable, que benefició indirectamente a Bitcoin.
Además, el administrador de activos Bryan Courchesne apareció recientemente en CNBC para discutir el potencial de Bitcoin para convertirse en un activo de reserva estratégico para el gobierno de EE. UU. bajo una futura administración Trump.
Según el gestor de activos, adoptar Bitcoin como activo de reserva será difícil pero no imposible. Courchesne señaló las grandes tenencias de 200.000 BTC del Departamento de Justicia, lo que convierte al gobierno de EE. UU. en el segundo mayor poseedor de Bitcoin después de su creador seudónimo, Satoshi Nakamoto.
Courchesne explicó que el Departamento de Justicia podría transferir fácilmente el Bitcoin al Tesoro de los Estados Unidos, allanando el camino para que el Tesoro comience a acumular y mantener el escaso activo a largo plazo.
La elección por parte de Trump de JD Vance, un poseedor de Bitcoin de 39 años, como su compañero de fórmula también fortalece la especulación de que una futura administración Trump podría significar una nueva era para las criptomonedas, una en la que Bitcoin esté completamente integrado en el sistema financiero actual.
Citado por Coin Telegraph, el inversionista multimillonario Mark Cuban también imagina un escenario en el que la inflación generalizada y la inestabilidad geopolítica impulsen a la población mundial a recurrir a Bitcoin como refugio para asegurar los ahorros y el poder adquisitivo de toda su vida, convirtiendo a Bitcoin en una moneda de reserva global orgánica.
Los datos de países con alta inflación como Argentina, Venezuela y Turquía muestran que esto ya está empezando a suceder, y la población recurre a las criptomonedas como protección contra la inflación.
En medio de varias proyecciones positivas hacia Bitcoin, Peter Schiff, un conocido crítico de las criptomonedas, ha respondido a las predicciones de Kiyosaki con escepticismo. Schiff argumentó que si bien un dólar estadounidense más débil podría beneficiar financieramente a algunos estadounidenses, en última instancia podría empobrecer al país.
Schiff predijo que tal cambio conduciría a precios más altos del petróleo, a pesar de un aumento en la perforación interna. También sugirió que si bien el oro y la plata pueden superar las predicciones de Kiyosaki, Bitcoin podría perder valor.
El debate entre Kiyosaki y Schiff plantea importantes cuestiones sobre el futuro de la economía estadounidense y el papel de las criptomonedas.