La actitud de Trump hacia las criptomonedas se puede dividir en tres etapas, a saber: oposición cuando era presidente (¿responsabilidad?), familiaridad y participación cuando dejó el cargo (tendencias y negocios), y apoyo y aceptación ahora durante la campaña (sondeo de votos).

Las tres etapas abarcan desde 2017 hasta 2024, lo que también es evidencia del desarrollo del cifrado, desde la estigmatización hasta la popularidad y el cumplimiento/popularización.