Según BlockBeats, el 12 de julio, el presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos en Chicago, Charles Evans, expresó que el informe de inflación de junio fue sobresaliente. Sugirió que se podría considerar un recorte de tipos o una serie de recortes de tipos basándose en los datos.

Evans aseguró que no hay necesidad de entrar en pánico por la situación del desempleo ya que el mercado laboral es estable. Hizo hincapié en la importancia de la flexibilidad en las decisiones políticas, afirmando que es necesario decidir cuándo recortar las tasas, en lugar de tratar de predecir la trayectoria de las tasas de interés para los próximos siete meses.

Esta declaración indica un cambio potencial en el enfoque de la política monetaria de la Reserva Federal, centrándose en responder a las condiciones económicas actuales en lugar de intentar pronosticar tendencias futuras. Esto podría tener implicaciones significativas para la economía y los mercados financieros de Estados Unidos.