El gobierno de las Bahamas planea hacer cumplir regulaciones que obligarán a los bancos comerciales a distribuir su moneda digital del banco central (CBDC), conocida como dólar de arena. A pesar de los esfuerzos por fomentar la adopción, la CBDC representa menos del 0,41% de la moneda en circulación y su uso ha ido disminuyendo. El Banco Central de Las Bahamas está recurriendo ahora a la regulación para impulsar la adopción. Este enfoque refleja el de Nigeria, donde el banco central enfrentó una falta de interés similar en su CBDC y recurrió a retirar efectivo de la circulación para impulsar su adopción. Los críticos argumentan que si un producto requiere fuerza para su adopción, puede que no sea una buena idea en primer lugar.