El director ejecutivo y fundador de DCG, Barry Silbert, y el director ejecutivo de Genesis, la rama comercial de propiedad total de DCG, Soichiro “Michael” Moro, están haciendo un último esfuerzo para persuadir a los fiscales de que desestimen una demanda por fraude civil presentada en su contra por la fiscal general del estado de Nueva York, Letitia James. James acusó a Genesis y DCG de hacer "falsas garantías" en Twitter, alegando que DCG había absorbido las pérdidas de Genesis por el colapso de 3AC. Pero en lugar de tapar el agujero de mil millones de dólares con una inyección de efectivo, DCG lo cubrió temporalmente con un pagaré que prometía pagar a Génesis 1.100 millones de dólares durante diez años a una tasa de interés del 1 por ciento. Según James, DCG nunca pagó un centavo del pagaré. Genesis y Gemini llegaron a acuerdos con NYAG, pero DCG, Silbert y Moro han estado luchando contra las acusaciones de fraude, calificando la demanda de "infundada" y negando que el pagaré fuera una estafa, argumentando que el pagaré fue completamente examinado y legalmente vinculante. Además, DCG transfirió cientos de millones de dólares en fondos y activos a Genesis para tapar agujeros en su balance. James respondió que los tweets eran "tergiversaciones deliberadas de hechos existentes" diseñadas para engañar a los inversores y violaban la estricta ley antifraude del estado de Nueva York, la Ley Martin. (CoinDesk)