• Bolivia levanta la prohibición a las entidades financieras de utilizar criptomonedas.

  • La falta de regulaciones claras plantea desafíos para las empresas de cifrado.

  • La medida podría inspirar una adopción más amplia de las criptomonedas en América Latina.

El banco central de Bolivia levantó una prohibición de cuatro años sobre el uso de criptomonedas por parte de instituciones financieras, una medida que podría desbloquear un potencial significativo para los activos digitales en el país y en toda América Latina.

Este cambio permitiría a los ciudadanos bolivianos comerciar alrededor de $10 millones en criptomonedas por mes, con expectativas de un mayor crecimiento luego del cambio de reglas, según el jefe del banco, Edwin Rojas.

Si bien la derogación de la prohibición señala un avance positivo para la nación, también expone un vacío regulatorio, que presenta desafíos importantes tanto para los usuarios como para las empresas. Para las empresas centradas en las criptomonedas, la ausencia de regulaciones integrales crea dificultades en áreas como la tributación, el cumplimiento contra el lavado de dinero (AML) y la protección del consumidor. Al navegar por este panorama incierto, las empresas criptográficas también pueden enfrentar desafíos operativos mientras abogan por marcos regulatorios que equilibren la innovación y la seguridad.

Dicho esto, la decisión de Bolivia podría provocar un efecto dominó en la aceptación de las criptomonedas en América Latina. La región ha mostrado un gran interés en los activos digitales, considerándolos herramientas financieras viables. Además, América Latina se enfrenta a la inestabilidad económica, las altas tarifas de las remesas y el acceso limitado a los servicios bancarios. Los activos digitales ofrecen una inversión alternativa y una protección contra la moneda fiduciaria, lo cual es crucial para los países en desarrollo azotados por la inflación. Esto reduce su dependencia del dólar y del Fondo Monetario Internacional (FMI), lo que podría aliviar las cargas económicas.

Además, países como El Salvador ya han adoptado Bitcoin como moneda de curso legal, lo que demuestra el impacto potencial de tales decisiones. Otras naciones, como Brasil y Argentina, también están explorando activamente sus caminos hacia la adopción de las criptomonedas. Si bien la medida de Bolivia podría inspirar a otras naciones de la región a adoptar las criptomonedas, establecer regulaciones claras será esencial para abordar los desafíos y aprovechar plenamente los beneficios de los activos digitales. Esto garantizará un entorno estable y seguro tanto para las empresas criptográficas como para los inversores.

En general, la revocación de la prohibición por parte de Bolivia es un paso importante que podría catalizar la adopción de las criptomonedas en América Latina, transformando el sector financiero y potencialmente fomentando el crecimiento económico.

La publicación Banco Central de Bolivia revierte la prohibición de las criptomonedas y abre la puerta a la innovación financiera apareció por primera vez en Coin Edition.