Según ChainCatcher, el índice MOVE, un indicador de volatilidad para el mercado del Tesoro de EE. UU., ha seguido aumentando desde que tocó fondo en 82 puntos a mediados de diciembre, subiendo a 102,78 puntos el 8 de enero. La mayor volatilidad en el mercado del Tesoro indica un endurecimiento de las condiciones financieras, lo que puede desencadenar aversión al riesgo.
Los últimos datos mostraron que el sector manufacturero tuvo un desempeño mejor de lo esperado, lo que impulsó los rendimientos de los bonos del Tesoro estadounidense al alza en todos los ámbitos. El rendimiento del Tesoro estadounidense a 30 años subió al 4,92% y el rendimiento del Tesoro estadounidense a 10 años subió al 4,68%.
El mercado observó que Bitcoin y el índice S&P 500 mostraban un patrón de "cabeza y hombros", haciéndose eco de la tendencia del índice MOVE. El 8 de enero, Bitcoin cayó un 5% a 96.900 dólares y el S&P 500 cayó más del 1%. Los analistas señalaron que el mercado de bonos domina las tendencias del mercado y es difícil que los activos de riesgo retomen su tendencia alcista.