Según Odaily, el gobernador del Banco Central de Corea del Sur, Lee Chang-yong, expresó el jueves su preocupación por la posibilidad de que los recortes de las tasas de interés en curso se conviertan en una fuente de ansiedad. Se comprometió a vigilar de cerca los factores de riesgo para determinar el ritmo de la política monetaria del banco central. El Banco de Corea tiene previsto celebrar una reunión de decisión sobre las tasas este mes, en medio de la agitación política más grave del país en décadas. Esta inestabilidad política ha provocado que el won surcoreano caiga a su nivel más bajo desde 2009 y ha ejercido presión sobre el mercado de valores.

El domingo pasado, un accidente aéreo de Jeju Air provocó la muerte de todas las personas a bordo, menos dos, lo que podría afectar aún más la confianza de los consumidores. En su discurso de Año Nuevo, Lee afirmó: "En la situación actual, es difícil estabilizar la economía únicamente a través de la política monetaria". También advirtió que el vacío de liderazgo que existe podría ejercer presión sobre el mercado.

Mientras el presidente electo de Estados Unidos, Trump, se prepara para regresar a la Casa Blanca, el banco central de Corea del Sur recortó inesperadamente las tasas consecutivamente en el cuarto trimestre del año pasado para apoyar a la economía frente a los vientos comerciales.