En un sorprendente giro del destino, dos hermanos de Westchester, Nueva York, se encontraron millonarios de la noche a la mañana gracias a una inversión inesperada en una criptomoneda que comenzó como una broma. Tommy, 38, y James, 42, hicieron titulares cuando su modesta apuesta en Shiba Inu Coin—una parodia de Dogecoin—se convirtió en una fortuna que cambia la vida.
La Inversión Improbable
Los hermanos inicialmente invirtieron unos pocos cientos de dólares en Shiba Inu Coin, alentados por un amigo que creía que podría ser una oportunidad lucrativa. “Lo pensé como un billete de lotería que no caducaría,” recordó Tommy. Su inversión inicial de $200 cada uno rápidamente se multiplicó, e incluso convencieron a sus familiares para que se unieran, llevando su inversión total a casi $8,000.